Erase una vez, que se me ocurrió la genial idea de escribir las anécdotas y aventuras que me contaban mis amigas.
Todo empezó a raíz de oír un comentario en un festival en el pueblo en el que vivo. Allí al ladito de mi tenía a uno de esos hombres de treinta años sin atractivo ninguno que aparentan cincuenta sin esforzarse y que hablan alto para que todo el mundo oiga lo que dice. Y además recuerdo que lejos de sentarme mal, me llamo la atención la frase y el tono que utilizó.
Según me quedó claro "a el no le gustaban las mujeres cuarentonas". La verdad que me dio que pensar su comentario. Y fue cuando me pregunté , ¿que tienen las de treinta que no tengan las de 40?
Volví a mirarle y me di cuenta que era de ese tipo de hombres que han llegado a la treintena sin haber aprendido nada, exentos de cultura y obligados a ir adaptandose a la vida a trompicones. Tal vez el piense que llegar a los 40 es el fin del mundo.
Cuando cumples los 40 entras en eso que llamamos la segunda juventud. Una transición que lejos de quitarle sentido a lo que ha sido hasta ahora tu vida, le da serenidad y una visión diferente.
Te sigues planteando metas y retos, y llegas a esta etapa de tu vida con los sueños no realizados intactos, dispuesta a seguir intentándolo.
Y me pregunto ¿es ahora realmente con mis 40 cuando empieza otra etapa de mi vida, o simplemente continua con otra visión de la misma?
Con la edad controlas tu vida con las riendas de la experiencia y ves el mundo con los ojos de la madurez. Tienes todo lo que una jovencita desearía, aunque tu en secreto anheles aquello que ella posee, "la juventud".
No corres tanto por nada, porque todo eso por lo que corrías ya lo has hecho, ahora vas despacio para saborear todo el banquete que es tu vida. Festejas cualquier cosa, bailas toda la música, escuchas, atiendes y no dejas muchos segundos al enfado y a los malos pensamientos. Y si eres madre te cambia inevitablemente la vida. Tu pareja, tus amigos y todos quedan debajo de no más de tres kilos y medio que pesa la persona más importante para ti cuando viene al mundo.
Los 40 pueden ser lo divertido que una quiera.
Da igual si eres casada con hijos, viuda, separada o soltera. Tu vida tiene un punto y seguido no un punto y final. "Y las críticas que realmente pueden hacernos daño o cambiarnos son las nuestras propias."
Puedes amargarte y ser una sufridora que haga más rápido el trabajo del colágeno de desaparecer, o tomarte tu segunda juventud como un viaje lleno de aventuras.
Todas las historias que voy a ir contando son reales y cuando nos han pasado a parte de divertirnos nos han hecho aprender. Seguro que más de una cuarentona se ha encontrado en algún momento en una situación igual o parecida.
Mis dos amigas son mi inspiración aunque no todas las historias son suyas. Existen otro grupo de mujeres al cual tengo el placer de pertenecer.
Yo de todo esto lo que he sacado han sido buenos momentos, entre comidas, cafés y más cafés.
Esta es la demostración de que siempre les escuché cuando me hablaban.
Buenisimo! Espero poder leerlo... me hace muuucha ilusion ya que desde aqui ya puedo ver una puerta, no muy lejos, con un cartelito que dice: "Bienvenida a los 40"!!! un abrazo
ResponderEliminarFelicidades!Me ha gustado tanto como me ha sorprendido .Un beso
ResponderEliminarFabulosa introdución !!!! Necesito seguir leyendo....
ResponderEliminarA todos los que entreis en este blog que sepais que esto forma parte de una futura escritora de BEST-SELLER. Saludos a todos y todas
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