sábado, 28 de febrero de 2015

OVEJAS, LOBOS Y PERROS PASTOR.

Si un lobo llama a tu puerta seguramente no bales, posiblemente le ladres. 

Fui a ver el Francotirador, y tan solo decir que ha sido magistral y sólo tengo elogios. 
Una película que considero debía de haberse llevado más de un Oscar, pero.....
Ante todo decir que no puedo ser imparcial a la hora de opinar sobre Clint Eastwood. Me gusta todo de él. Desde actor pasando por director, guionista, compositor, etc..... Y a sus 84 años considero que es un hombre por el que a pesar de la edad se casarían con él por amor. 

Lo que separa a Eastwood de otras estrellas de taquilla son sus películas, especialmente desde que empezó a dirigirlas. Todas ellas acaban tratando sobre su visión de la vida en América. 

Con El francotirador encara por fin las guerras recientes y sus secuelas: el regreso de los veteranos, el medio millón de excombatientes con la herida invisible y vergonzante del estrés postraumático y la agónica pregunta: ¿para qué tanto dolor, tanta muerte?

Un éxito de taquilla en Estados Unidos que ha suscitado la polémica entre quienes la consideran panfletaria y racista y quienes creen que refleja las consecuencias de la guerra.
Para ser sincera no creo que la película interese por la guerra, sino por el impacto en la vida de una persona. 
El verdadero francotirador era extremadamente patriota y amaba lo que hacía. Amaba su trabajo. 
Y así se hizo ver el la película. 
Lejos de remorderle la conciencia el no era ni oveja ni lobo. Era perro pastor. Defendía a los suyos, "¿Y quien no lo hace?
"¿Que harías si una mujer embarzada entrara en tu casa a matar a tu hijo? ¿No la matarias tú a ella? ¿Que remordimiento te quedaría? A mi ninguno.




He de confesar que admiro profundamente el sentimiento patriótico que tienen los estadounidenses para los suyos. Eso en el país de Quijotes en el que vivo no ocurre.
 

 























Aquí hace años, (quizá cuando la guerra civil) se instaló la envidia y no ha vuelto a marcharse. No gozamos de ese sentimiento que ante la adversidad nos hace estar unidos. Creemos que el mundo se salvará, y el mundo esta abocado al desastre. 
Ahora me ha venido a la memoría cuando España jugaba los mundiales, que unas amigas y yo como veíamos que estabamos ganando pues decidimos apoyar cada partido llevando unas pulseritas de la bandera de España que se vendían por todos los lados. Nosotras pasabamos de camisetas y pelucas, preferimos algo más sutil y fino. 
Y aun me pitan los oidos cuando en la semifinal, sentadas en una cafetería oigo detrás de mi, "mira estas pijas con la bandera de pulsera, vaya fachas". No supe en aquel momento si esconderme la pulsera o ponermela en la frente. En aquel momento me di cuenta que nosotros no eramos ni seremos nunca como los americanos. Una piña. 
Así pues, si el francotirador real mató 160 personas lo hizo porque sino hubiesen matado a 160 de los suyos o quizas más.  


A la mierda el remordimiento de conciencia. 
Altamente recomendable ir a verla.

 

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